1. No saldrás de casa sin ella. Ponerse máscara de pestañas alegra cualquier ojo y cualquier mala cara. Así que a no ser que lleves permanente y tinte de pestañas, es mejor no prescindir de ella.
2. No usarás la misma que tu mejor amiga. Depende de cómo tengas las pestañas te sentará mejor una que otra. Hay algunas que son tan buenas que sientas bien a casi todo el mundo, pero dependiendo de la fórmula y el cepillo habrá una que cubra tus necesidades.
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| Mae West |
3. No compartirás el producto. Puedes contraer alguna infección ocular por contagio.
4. Empezarás aplicar el producto desde la raíz. Luego lo irás extendiendo con movimientos en forma de zig-zag hasta las puntas,
5. No dormirás con ella puesta. Ya sé que cuesta desmaquillarse cada noche, queridas...
6.No usarás el color marrón a no ser que tu pestaña sea rubia. Bajarás color e intensidad si te pones un color más claro que el tuyo natural.
7.No parecerás una cabaretera. Los colores a lo "Cirque du Soleil" mejor con moderación. Puedes usarlos en las puntas para dar un toque divertido, como por ejemplo el azul eléctrico, y en looks que no mezclen demasiados colores.Olvídate del color rojo o rosa si tienes la mirada cansada y enrojecida.
8. No te excederás con las pestañas postizas. Si se te van de las manos, acabarás pareciendo miembro del reparto de Geordie Shore.
9. No te pondrás máscara en las pestañas de abajo si tienes los ojos caídos. Ni en exceso para evitar el efecto "patas de araña".
Es importante cargar más la raíz que las puntas.
10. Tendrás cuidado con los grumos. Más no es más. A partir de determinado número de capas las pestañas dejan de lucir maravillosas y se pegan unas a otras, se hacen grumos...
Si se te han quedado las pestañas pegadas, pasarás un cepillito de las cejas antes de que se seque el producto para retirar el exceso.
¿Qué truquitos tenéis vosotras para la máscara de pestañas?
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